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Cosas divertidas que hacer cuando te aburres

Esa lista de cosas divertidas por hacer...




Pasear por los acantilados de una zona costera.



Seguro que a la playa vas más a menudo, pero prueba a pasear por una de las cordilleras que suele haber a cada extremo. No necesitas ni siquiera compañía. La sensación de libertad es grande, sobre todo si puedes subirte a una roca alta, extender los brazos y sentir la fuerte brisa que viene del mar. Pero ten cuidado, que la vida tiene mil cosas divertidas que hacer como para arriesgarlo todo por hacer el cabra.


Leer Watchmen, el cómic más vendido de todos los tiempos.



No es necesario que te gusten los superhéroes, ni siquiera los cómics, Watchmen es crítica social, y ni siquiera son héroes. No soy especialista en cómics, pero hay un puñado que me flipan: V de Vendetta, Sin City, alguno de Batman, The Crow. Prueba a leer un cómic, pero de modo pausado, fijándote bien en los detalles de los dibujos, ya que dicen más que las palabras. Si les dedicas sólo cinco minutos, no te dirán nada. Si te dejas llevar por las viñetas, te sorprenderán. Y eso de que los fans de los cómics no ligan, por favor, déjate de prejuicios tontos. Acaso no ves pelis basadas en cómics. Pues ya está todo dicho.


Plantar un árbol. En serio.

Tienes que pensar que algún día tendrás que llevar a tu nieto pequeño de paseo. Qué mejor sitio que un árbol que has plantado hace tropemil años como sitio contarle las historias de tu vida. Puedes plantarlo con tu hijo pequeño, y luego llevar a tu nieto y contarle esa historia. O mejor, invéntate una búsqueda del tesoro, la de aquel malvado pirata con pata de palo. También puedes meter en una caja un mapa hecho a mano y enterrarlo. Después de 40 años bajo tierra seguro que tendrá pinta de antiguo. Esconde a unos metros un juguete y ayuda a tu nieto a encontrar el tesoro siguiendo el mapa. Será una experiencia que tu nieto nunca olvidará.


¿Sabes patinar?

Entonces aprende a usar el monopatín. Venga, no seas vergonzoso, qué más da que te vean. Busca un atuendo cool, y un poco underground, y lánzate. Además es deporte, y más divertido que simplemente correr.


Comprueba la teoría de los seis contactos.



Estamos a seis contactos de cualquier persona del mundo. Eso dice la teoría, pero en la práctica... Realmente no conozco a nadie que lo haya intentado. Puedes buscar a la chica más divertida de internet y entrevistarla en una montaña rusa, contactar con aquel vigilante que viste de niña en la playa, retomar el contacto con la chica que bailaba en la tarima de la disco, pedirle un baile a Shakira, o entregarle una carta contándole esta historia a Bebeto, Valerón o Djalminha. Traza un plan. Busca por intereses, por zonas geográficas... Lo más difícil será involucrar a los contactos intermedios. La gente suele decir sí, sí, qué guay, para luego mirar para otro lado. ¿Conoces a alguien de A Coruña que juegue a fútbol? ¿A un socio del Depor? Contáctalo, seguro que conoce a otro que conoce a uno que es miembro de una peña. Pues ya estás a un paso de contactar con Bebeto. Quizás Valerón se preste más a seguir el juego. Si lo logras y te apetece difundirlo, escríbenos, dedicaremos un reportaje a la historia.


Cambia la decoración del salón o de tu habitación.



Puedes cambiar los muebles de sitio, buscar láminas para poner unos cuadros más modernistas, cambiar los colores... Piensa que es un lugar en el que pasas muchas horas, redistribuirlo de vez en cuando mejorará tu inspiración.


Lee un relato corto de terror a la luz de una vela.



Busca un libro pequeño o un relato corto, algo que puedas leer del tirón, ya que es mejor la sensación que tiene uno cuando termina las cosas. Siéntate en tu sillón favorito cerca de una ventana, un día de lluvia, apaga las luces, y lee a luz de la farola. Si enciendes una vela abre un poco la ventana, la brisa moverá la llama y entonces la luz se moverá sobre las hojas del libro mientras lees, creando sombras. Será una sensación nueva.


Aprende a plantar legumbres en macetas para crearte una huerta en el balcón.



Comer sano es bueno, para el cuerpo y para la mente. Y hoy en día hasta la comida sana es poco sana, pues está cargada de pesticidas o, en el caso de la fruta, madura a la fuerza. Hay webs que enseñan a crear huertas urbanas, incluso dentro de un piso. Aquí un ejemplo de cómo hacer un huerto en tu piso. Plantar tus propios alimentos se está extendiendo exponencialmente en las zonas urbanas. Busca en Internet, te sorprenderá la cantidad de artículos que encontrarás.


Hacer una caza del graffiti.



Pilla tu cámara de fotos y sal por tu ciudad a la caza del mejor graffiti. Te sorprenderá la calidad de las obras. Analízalas, muchas tienen un significado que tiene que ver con la ubicación, los colores, la forma... Piensa que es un modo de expresión, esa obra que estás viendo puede ser una crítica social brutal, o incluso una barbaridad. Una vez hayas fotografiado los mejores, usa Photoshop o Gimp (que es gratuito) y súbeles el contraste y la saturación, alucinarás al ver como mejoran los graffitis con estos sencillos retoques.
Matar el aburrimiento es más difícil de lo que parece. Las ideas aparecen, pero cuando ya estás haciendo algo. En el momento que las necesitas, se las ha llevado el viento. Puedes probar a apuntarlas, pero no siempre te será posible. Sólo te quedará estrujarte los sesos y pensar qué hacer para no aburrirte, o leerte este artículo. Porque lo de tirarte en el sofá es cansino y poco provechoso. ¿Qué historias vas a contarle después a tus amigos?



Es imposible no pensar



Sí, no resulta fácil tirarse en el sofá sin nada que hacer. Lo de Homer Simpson tiene más mérito del que parece. Más cerveza de la que pudiera parecer. Dejarte caer en el sofá y olvidarte del mundo, en mi opinión sólo es divertido después de que te salga bien un examen difícil. Un momento en blanco, un instante de relax después de un montonazo de estrés.

Y más difícil todavía es dejar la mente en blanco, por mucho que te parezca que la cabezota de aquel tipejo pesado está más hueca que el botijo de la casa de tus abuelos. Resulta más fácil pensar un puñado de cosas divertidas que puedes hacer, que simplemente no pensar. En serio, y te lo voy a demostrar. Pensaré por ti mil cosas que podrás hacer cuando te aburras. Bueno, no mil, porque entre todas las cosas que se me ocurran, seguro que encontraré una a la que no podré resistirme.
Un puñado de cosas divertidas que podrás hacer si te aburres
AQuemarropa.es - Tiempo Libre - Crónicas del Paraíso

Rebusca objetos olvidados en el desván de tus abuelos.



Con el paso de los años habrán ido a parar al desván de tus abuelos un montón de objetos, cada uno con su propia historia.


Lee un relato corto en el sillón de una cafetería desconocida.



Un café caliente, una butaca apartada del mundanal ruido y un relato corto de misterio. O de una temática que pegue con la decoración de la cafetería. Te meterás mejor en la historia si todo está en consonancia.


Lleva a tu novi@ a cenar un picnic en la playa.



Tendrás que prepararlo bien, así que esa tarde no tendrás tiempo de aburrirte. Necesitas un mantel de cuadros, una fiambrera, preparar algo de comer que l@ sorprenda, y un poco de champán para que suba la temperatura. Si sube mucho, ya sabéis... La sensación de bañarse desnudo en el mar, dicen que es muy buena.


Pinta un cuadro de arte abstracto o surrealista.



Un lienzo, unos botes de pintura y una bandeja. Embadúrnate las manos y apóyalas contra el lienzo hasta que queden marcadas. Prueba con distintos colores, incluso con las manos manchadas de varios colores al mismo tiempo. Hay un tipo de pintura especial para pintar con los dedos. Será mejor que uses esa... Cuando hayas terminado el cuadro de tus manos, puedes probar a hacer otro con los pies. Luego, puedes pintar algo con los dedos, una hilera de coches de distintos colores, por ejemplo. Los dibujos de niños, suelen quedar bien. Una vez terminadas las obras, sólo te queda firmarlas y colgarlas de la pared del salón. No tendrás un Miró, pero tampoco todos tus amigos van a ser entendidos de arte. Ah, claro, no digas que los has pintado tú, a partir de ahora, para tus visitantes son obras que han costado mucho dinero. Alguno picará y se hará el entendido, así podrás reírte un rato de él. Puedes colgarlo al lado de alguna lámina de arte abstracto -Tanguy, Dalí, Ernst-, así darás más credibilidad a tu obra, y podrás reírte más de tus amigos.


Escribe una historia a partir de palabras al azar.



Este ejercicio se realiza en colegios, talleres de escritura... Corta unos cuantos papeles y escribe una palabra en cada uno. Ahora sólo queda dejar fluir la imaginación. Varias palabras escogidas al azar pueden ser el punto de partida de historias geniales con las que pasar una tarde entre amigos.


Mira al cielo azul acostado en un campo.

A veces las cosas más sencillas generan un montón de placer. Y normalmente estamos demasiado ocupados para mirar las nubes, escuchar los sonidos de la naturaleza, respirar aire puro o sentir el tacto de la hierba.


Sube a una montaña y apóyate en la ladera para disfrutar el paisaje.

Un paisaje suele disfrutarse más desde las altura. Además suele reinar la tranquilidad.


Volver a ver Pulp Fiction.

No importa que la hayas visto, Pulp Fiction es una película para ver al menos una vez al año. Sino ¿ya has visto todas las películas de Alfred Hitchcook? Puedes hacerte una sesión de cine. Con la Trilogía de El Padrino tienes para toda la tarde. Siempre es un buen momento para repasar los clásicos: Casablanca, Ciudadano Kane, Juan Nadie, El Cartero Siempre Llama Dos Veces (la de 1946, por favor), El Crepúsculo de los Dioses, Sucedió una Noche, La Ley del Silencio, El Golpe, Alguien Voló sobre el Nido del Cuco... Vamos, que si te aburres siempre puedes ver una buena película.

Quizás deberíamos escribir un artículo sobre 100 grandes películas que tienes que ver al menos unas vez en la vida.


Montar en una montaña rusa y soltar las manos.

En mi ciudad no hay parque de atracciones, no hay montaña rusa. Tampoco hay noria. A veces sólo valoramos las cosas importantes cuando no las tenemos cerca.


Recrear el cartel o la intro de una película y grabarlo con el móvil.



Ponte traje y convence a tus amigos para que también se lo pongan. Después puedes pedir a alguien que os grabe a la salida de un bar, mientras os movéis al estilo de los tipos de "Reservoir Dogs". Fotografía a tu novia a lo Uma Thurman en el cartel de "Pulp Fiction". Si tienes una moto clásica, puedes grabarte pinzándola a lo Steve McQueen en "La Gran Evasión". Puedes fotografiar a una amiga a lo Audrey Hepburn en "Desayuno con Diamantes". Con unos chubasqueros y unos paraguas podéis imitar el cartel de "Cantando Bajo la Lluvia". Si tu novio es un guaperas, pídele que imite a James Dean en el cartel de "Rebelde Sin Causa", o a John Travolta en "Fiebre del Sábado Noche" o en "Grease".
Graffiti de unos astilleros
Para ilustrarlo hemos usado dos graffitis, uno resulta fácil saber lo que representa. El segundo es un dibujo de los astilleros de Fene y Ferrol, de los que depende el futuro de la comarca y que hoy se encuentran casi sin carga de trabajo.

Dibujo de la sombra de un hombre en caída libre
Dibujo Fómula molecular de la adrenalina y un deportista de snowboard
Diseña una maqueta con Lego o Meccano.

No te creas eso de que son juegos para niños, que también. Existen piezas de Lego especialmente pensadas para arquitectos y versiones de Meccano para pequeños ingenieros.


Conviértete en un Maker, no te volverás a aburrir nunca más.



La gente tiende a pensar que los inventores se extinguieron el siglo pasado. Hoy es cierto que los grandes inventos y los descubrimientos suelen tener tantas variables que son proyectos que engloban a equipos de trabajo formados por muchos científicos, ingenieros, médicos... Pero hay un montón de cosas que puedes hacer por ti mismo, como reparar cosas, fabricar artilugios, domotizar tu casa... Puedes encontrar comunidades de Makers en la web y ver sus muchos inventos. La principal herramienta será tu cabeza, y esa vieja caja de herramientas que guardas por algún rincón del garaje. El resto lo irás aprendiendo poco a poco: diseño con programas de CAD, programación de Arduinos, impresión en 3D...
Aquí, una comunidad española de Makers donde podrás saber más sobre este nuevo movimiento.


Intenta crear una foto artística.

Puedes fotografiar a tu vecina colgada de una percha, a tu hermana abrazada a un árbol enorme... También puedes jugar con efectos ópticos. Por ejemplo, desde un puente, fotografía como un pie parece pisar un coche.


Inventa una leyenda urbana y mira cómo se expande.



¿Que cómo crear una leyenda urbana? Pues no es fácil. Me llevó un buen rato sacar algo de mi cabezota. Ahí va mi leyenda urbana, se llama "La leyenda de la niña del lago".

Le pasó a un amigo de mi primo. Aquel día el chaval estaba de santo, San Manuel. Se levantó muy temprano y salió a dar un paseo por el lago para respirar el aire puro de la sierra.

Llevaba un rato caminando cuando se fijó en una niña rubia que nadaba en el medio del lago. Era invierno... Pensó: vaya padres. Pero no vio a ningún padre por las inmediaciones. Cuando volvió a mirar, la niña no estaba. Se puso a escudriñar el lago como un loco, se acercó a la orilla. No había nadie.

Claro, llamó a la policía. En el agua no había ningún cuerpo flotando, pero el amigo de mi primo la había visto. ¡La había visto!

La policía comprobó que no había ninguna denuncia. Pero el amigo de mi primo estaba seguro. Ante la insistencia del chaval, trajeron una zodia, y buzos.

Pero no encontraban nada.

Un viejo que pasaba por el lugar les preguntó qué hacían.

El viejo meneó la cabeza. Hay una antigua historia... Manuela, una niña que se ahogó hace 40 años. Sí, rubia. Se ahogó el día de su santo. Durante una romería -que desde aquel día ya no se celebra- la tiraron desde la barca al agua. Sí, adrede, antes se hacía para que los niños aprendiesen a nadar... Gracias a Dios el mundo mejoró mucho, dijo el viejo.

Todos alucinaron. Manuel se fue a su casa, un tanto confuso. Se encontró con los bomberos. Había mucho humo y no veía nada. Los bomberos le dijeron que su casa se había quemado. Él no estaba dentro porque intentó salvar a una niña.

Se puede decir que un fantasma lo salvó.


Sí, vale, la historia está pillada con pinzas, y es un poco larga, pero no resulta fácil crear una leyenda urbana, así de la nada. Más bien me salió una historia de hogueras en el bosque.

Ten cuidado con lo que inventas o escribes en las redes, se trata de crear una historia divertida, como la de los cocodrilos albinos en las alcantarillas de New York, la de las pirañas en los estanques de Madrid, la de la chica de la curva, la de las gafas para ver a través de la ropa o la del hombre del gancho. Si no estás muy inspirado hoy, usa alguna que ya exista e intenta propagarla de nuevo. Las leyendas urbanas son cíclicas, aparecen una y otra vez, repetidas incluso en distintos países. Seguro que se te ocurre como compartir la historia entre tus contactos para que se difunda.


Escucha un podcast de misterio

Hoy casi todos los programas de radio se pueden escuchar en podcast desde cualquier parte con un móvil. Hay de todos los tipos: cine, misterio, deporte, música, historia, para aprender inglés... Uno de los mejores y más exitosos podcasts es La Rosa de los Vientos, un programa de noticias de actualidad, de ciencia, de misterio, de historia, de mil cosas.
Imagen icónica de La Gran Evasión

El genial Steve McQueen
Un rayo naranja y amarillo
Y por hoy ya me cansé de pensar en cosas que hacer, me voy a la playa a darme un chapuzón de última hora. Seguiré añadiendo cosas a esta lista según se me vayan ocurriendo. Quizás también dibuje algo para ilustrarlo mejor.

Si te sigues aburriendo y te apetece seguir leyendo, en nuestro artículo Un Puñado de Cosas que hacer antes de morir encontrarás muchas otras actividades que seguramente te inspiren, aunque quizás sean bastante más surrealistas que las de esta página, metas casi inalcanzables.


Dibujo de una paracaidista en blanco y negro


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