Diseccionamos este nuevo disco de Bruce Springsteen canción a canción.
Así suena High Hopes....
High Hopes Primer single y canción que da título al álbum, lo cual resulta extraño porque se trata de una versión. Bruce Springsteen podría haber escogido otro título, pero el reconocimiento a Tim Scott McConnell, y a su grupo The Havalinas, hubiese sido menor.
High Hopes comienza con sonidos de percusión. Por un momento asoma una distorsión de la guitarra de Tom Morello. Un chispazo del guitarrista invitado que nos dice "aquí estoy" porque su solo emergerá más adelante. Entonces comienza de verdad la canción, con una melodía de guitarra acústica y la voz grave de Bruce Springsteen. "Monday morning runs to Sunday night, screamin... slow me down before the new year dies..." Un comienzo pausado, antes de que la canción despierte en el estribillo con toda la maquinaria de la E Street Band poniendo sonido de tintes funk mientras nuestro Boss canta "High Hopes".
Tom Morello no aparece hasta el final del segundo estribillo donde su solo pilla el primer plano, para bajar al segundo y mantenerse ahí cuando vuelven los versos del cantante. La canción va pillando épica hacia el final. Termina con Bruce cantando "High Hopes", pero vuelve de forma instrumental para pillarnos por sorpresa y volver a terminar.
Pueden ver el videoclip y una descripción de High Hopes con motivo del lanzamiento de este disco en el siguiente enlace:
Harry's Place Harry's Place nacería hacia el inicio de este milenio como canción para su disco de 2002, The Rising. Pero por una razón u otra, el compositor decidió no incluirla. Hace unos diez años quizás le faltaba algo y no acaba de convencer al compositor porque la presencia de Tom Morello data de este verano y se antoja básica en la construcción de la melodía de este tema.
Canción compleja en temática y significado, así como en estructura, ya que se construye en varias pistas de instrumentos que forman un muro intenso de sonido.
La canción comienza de golpe con la batería y el wah-wah de Tom Morello, se une un solo de corta duración que termina cuando emerge una voz melódica y profunda de Bruce Springsteen. Que nos narra en segunda persona como alguien se mete en un lío.
Entonces el tema alcanza el estribillo con una voz enlatada de Bruce Springsteen que, de modo intencionado, da sensación de lejanía. "Bring it on down to Harry's Place" (Resuélvelo en el territorio de Harry).
En los siguientes versos, nos canta sobre las normas de ese tal Harry, un tipo autoritario. En el ecuador de la canción un solo del saxo de Clarence Clemons pilla el protagonismo, acompañado por momentos de la guitarra de Morello en un segundo plano. Un punto muy intenso.
En cuanto a la letra, Harry parece una metáfora de algo trascendente. Pero las palabras del propio compositor nos sacan de dudas: Cuenta una historia de gánsteres. Y la canción deja bien clara una cosa sobre ese tal Harry: "Nadie sabe su número, ni su nombre, y si él no hubiera existido todo acabaría igual".
American Skin (41 Shots) No tarda en llegar uno de los grandes momentos del disco, una balada de mecheros en los conciertos que recibimos por primera vez en su versión de estudio. American Skin nos lleva al Springsteen más comprometido con la sociedad.
A diferencia del tema anterior, esta vez el significado de la canción es muy claro, narra la muerte del inmigrante guineano Amadou Diallo, que con sólo 23 años recibió 41 balazos de cuatro agentes de la policía de New York cuando iba a sacar su cartera para identificarse.
"41 disparos... Y pillaremos el viaje, a través de ese río sangriento hasta alcanzar la otra orilla... 41 disparos... rasgaron la noche..."
La pasión con la que canta Bruce Springsteen pone la piel de gallina y logra conmover, pues transmite todo el dolor de esta historia terrible.
En cuanto al sonido, American Skin comienza con una voz enlatada, un efecto similar al del estribillo de Harry's Place, ahora para decir "41 shots..." pero pronto salta al primer plano un torrente de voz, una bonita interpretación vocal de Bruce Springsteen.
Hacía el ecuador The E Street Band eclosiona vistiendo la canción y creando épica alrededor de un solo de guitarra que se adecua a la perfección al ritmo. La batería durante este solo tiene la virtud de aparecer en el momento justo para elevar la tensión.
Una canción por la igualdad de todos los hombres. Una canción inolvidable que en los conciertos nos hace llorar de emoción.
Just Like Fire Would Llega la segunda versión de las tres que contiene este álbum. The Saints es una banda punk australiana que cumple este 2014 su 40 cumpleaños.
El ritmo acústico de inicio de Just Like Fire Would y el buen desempeño de los teclados nos conducen al Bruce Springsteen más alegre y vitalizante. Los instrumentos de viento dotan al tema de un aire festivo. Una canción bailona de tono alegre que contrasta con la balada anterior. La canción se construye sobre una estructura sencilla, y no necesita más para funcionar.
I wanna rock n' roll, simplemente eso.
Down in the Hole El disco vuelve a frenar su ritmo para acariciar la balada. Esta vez de tono más nostálgico que triste, sentimiento seguramente conseguido por el desempeño de los coros y violines que adornan este quinto tema de High Hopes. Entre los arreglos vocales del disco, el de Down in the Hole es de los mejores.
Vuelve a sonar una voz sintetizada de Bruce Springsteen que a partir del segundo párrafo recupera su sonido real, en un tono agudo muy bonito, acompañado de un coro igual de bonito. Música y letra van de la mano, y estos versos del cantante de New Jersey nos llevan a la añoranza de un amor perdido que aún no ha cicatrizado sus heridas.
Heaven's Wall "Raise Your Hand, Raise Your Hand..." (Levantad las manos...) Así comienza este ritmo funk en la onda de High Hopes. Heaven's Wall sin embargo tiene un carácter más épico y menos festivalero. El tema está vestido por coros y voces superpuestas.
La letra nos sumerge en la travesía de fe de los judíos hacia su tierra prometida. O algo así. El origen de esta canción data de las sesiones de grabación de su 17º disco, Wrecking Ball. La última parte de este tema creció en las sesiones del año pasado, pues la presencia del guitarrista invitado, Tom Morello, es muy marcada.
Frankie Fell in Love La canción empieza en una onda folk que gana épica rockera cuando entra al follón toda la E Street Band. Todo comienza con un beso... quizás también lo hiciese esta canción de amor.
This Is Your Sword Los oídos no nos engañan, This Is Your Sword comienza con gaitas y acaba con banjo. La música de esta alegre canción evoca aires nórdicos. Recuerda a esas canciones tradicionales de celebración que los miembros de la familia o del pueblo bailan cogidos de la mano en un círculo. También en cuando a su temática. This Is Your Sword gira en torno a los valores familiares.
Hunter of Invisible Game La canción comienza con violines, que se apagan paulatinamente cuando empieza la percusión. Entonces pilla el protagonismo la voz de Bruce Springsteen, su voz dulce que canta a la clase trabajadora. Como tantas otras veces a lo largo de su carrera.
Los arreglos de violines sonarán aquí y allá, a lo lejos o a lo cerca, y junto con la guitarra acústica consiguen crear una melodía para cerrar los ojos y balancear los hombros a la cadencia de la música. Hunter of Invisible Game suena a los dos primeros discos de Bruce Springsteen, salvo por los arreglos, que son más elaborados, y de los mejores de este disco.
The Ghost of Tom Joad El golpe de sonido con el que comienza The Ghost of Tom Joad nos avisa de que hemos llegado a uno de los puntos álgidos del disco. Descubrir una canción como ésta sería un golpe anímico, un shock por su calidad en cualquier disco con contenido completamente original. Pero al ser una canción conocida se rompe un poco la magia.
Sólo un poco.
En High Hopes podemos escuchar la versión enchufada de un tema que nos sabemos de memoria. Un tema grande, que se vuelve épico. La voz de Bruce Springsteen es más enérgica en esta ocasión, así como el muro de música que crea The E Street Band cuando la canción levanta el vuelo. Esto tiene su parte positiva y negativa. El toque nostálgico y sentimental de la canción original se resiente en pro de la épica. Dos caras muy distintas de una misma canción.
El solo de Tom Morello ayuda a pausar la tensión antes de los últimos versos de Bruce Springsteen. El tempo de la canción se para y Bruce nos canta "The highway is alive tonight", para que salte la banda y acompañe al cantante en una parte arrolladora.
La canción termina larga después de los últimos versos del cantante, con el guitarrista invitado acaparando el primer plano durante los últimos dos minutos. Un solo que se acompasa bien al sonido de fondo de la banda, pero que resulta excesivo, tanto en duración como en distorsión.
Curiosamente esta versión no contiene la armónica tan característica de la versión acústica, aunque no le pegaría al ser una versión tan metálica.
The Wall High Hopes tendría menos significado sin esta balada que Bruce Springsteen tenía la necesidad de publicar por el homenaje que representa. The Wall cuenta la historia de su amigo Walter Cichon, un músico que describe como genial y encantador, muy influyente en la escena de New Jersey.
Y que falleció en la Guerra de Vietnam. La inspiración para la canción surgió cuando el compositor visitó junto a Patti Scialfa el Memorial a los Veteranos de Vietman, un monumento en honor a hombres como Cichon que se encuentra en Washington.
"Ahora, los hombres que te metieron aquí comen con sus familias en restaurantes caros. Y disculpa y perdón no tienen sitio aquí de ninguna manera. Aquí... en el muro"
Una canción de letra profunda e inspirada. La voz de Bruce Springsteen tiene un tono que recuerda a sus comienzos. Canción triste que parece llevarnos a la escena musical del Asbury Park de los '70.
Uno de los momentos de High Hopes.
Dream Baby Dream High Hopes llega al final con una balada. La versión de Bruce Springsteen de esta canción del grupo neoyorkino Suicide se parece al original... poco más que en los sintetizadores del principio.
Dream Baby Dream es una versión de un grupo muy psicodélico de los '70. Suicide estaba formado por el vocalista Alan Vega y el teclista Martin Rev. Sin más, y conseguían crear un muro de sonido que era arrollador en los directos.
La canción original es una balada de voz y teclados. The E Street Band la ornamenta con una interpretación que le da esa energía que impera en las composiciones de Bruce Springsteen. Empieza lenta... y crece y crece y crece...
La letra de Dream Baby Dream es un canto al optimismo, lo que ayuda a que esta canción funcione a la perfección como canción de cierre.
Sueña... Abre tu corazón... Sólo quiero ver que sonríes...
La composición del disco High Hopes
High Hopes es el décimo-octavo disco de estudio de Bruce Springsteen.
Ron Aniello repite en la producción y lo acompaña Brandan O'Brien que ya había trabajado anteriormente con el artista en Working On A Dream, Magic, Devil & Dust o The Rising.
Además de contar con los integrantes habituales, Tom Morello se une a The E Street Band en ocho de los doce temas para pillar la guitarra solista. El disco cuenta también con el sonido de Danny Federici y Clarence Clemons como homenaje póstumo.
Tom Morello se unió a la grabación La grabación de High Hopes comenzó en Diciembre de 2012, antes de la gira de Wrecking Ball. Una parte importante de la grabación se realizó en sesiones de estudio durante la parte australiana de esta gira. En esta parte se incorporaría Tom Morello.
El guitarrista estaba girando con el grupo, sustituyendo a Steve Van Zandt mientras participaba en una serie de televisión. El guitarra de los Rage Against The Machine congenió con Bruce Springsteen, que lo invitó a participar. Y su presencia en el disco no es testimonial, sino que deja su sello a lo largo de las ocho canciones en las que aparece.
El disco debutó en el primer puesto del Billboard 200 convirtiendo a Bruce Springsteen en el tercer artista con más discos en el número uno de esta lista.
Portada de High Hopes
Lanzamiento de High Hopes 18º disco de estudio de Bruce Springsteen
Casi nadie esperaba un nuevo lanzamiento de estudio de Bruce Springsteen cuando allá por Noviembre hizo público que tenía listo High Hopes, pues la gira de Wrecking Ball -disco que salió en marzo del 2012 y que todavía está muy fresco- terminó hacia finales de septiembre.
Y el 14 de Enero salió a la venta el 18º disco de estudio de The Boss.
High Hopes es un disco atípico en este artista. No tiene la magia de un disco de canciones inéditas. Pero tampoco está falto de magia. Bruce Springsteen no sólo ha juntado canciones de aquí y de allá, las ha reescrito, por ello sería injusto llamarlo disco de rarezas.
El mimo con el que el artista ha grabado estos temas se nota en la perfección instrumental y la sensación de conjunto y armonía que da cada canción por separado. No en su conjunto porque High Hopes dista de la unidad de otras de sus obras.
Pero el artículo que leen ahora trata sobre las canciones de High Hopes. Su significado, su descripción e información sobre cada uno de los doce cortes que componen el disco. Pueden ver nuestra crítica sobre el disco en el enlace bajo estas líneas.
High Hopes no es un lanzamiento de material nuevo. Este disco está formado por un puñado de canciones que simplemente no tuvieron su sitio en otros discos, ya sea por estilo o por fechas de creación.